El pelo blanco de los perros es tan hermoso como delicado. En razas como el samoyedo, el pastor suizo, determinados caniches blancos, bichones, westies o perros nórdicos, es habitual observar un fenómeno que preocupa a muchos cuidadores:
un tono amarillento, anaranjado o “oxidado” en la base de las orejas, como si el pelo hubiera perdido su pureza natural.
Aunque pueda parecer extraño, no es una enfermedad, ni un signo de mala salud, pero sí nos ofrece información valiosa sobre el perro, su piel, sus hábitos y su entorno.
A continuación explico las causas reales, cómo identificar cada una y qué podemos hacer para prevenirlo o mejorarlo.
1. ¿Qué es exactamente la “oxidación” del pelo blanco?
No es una oxidación en sentido químico estricto, sino una combinación de:
- Cambios en la queratina del pelo.
- Manchas externas (saliva, lágrimas, sudor, secreciones).
- Alteraciones del pH cutáneo.
- Microorganismos que tiñen el pelo ligeramente (levaduras como Malassezia, bacterias cromógenas).
- Acumulación de grasa natural (sebo) en zonas de roce.
El resultado es un tono:
- Amarillo
- Beige
- Naranja
- Incluso rojizo
que aparece sobre todo en zonas donde el pelo es más denso y existe humedad o roce, como la base de las orejas.2. Por qué pasa especialmente en samoyedos y nórdicos
Los samoyedos tienen:
- Subpelo muy denso que retiene humedad.
- Producción de sebo moderada a alta, para proteger del frío.
- Pelo hueco y poroso, que absorbe pigmentos con facilidad.
Esto crea el escenario perfecto para que el color cambie, sobre todo en la base de las orejas, donde:
- Respira peor la piel,
- La cabeza roza constantemente,
- Se acumula calor,
- La humedad tarda más en secar.
Causas principales del amarilleo en la base de las orejas
1. Exceso de humedad retenida
Baños, lluvia, babas de otros perros o simple condensación por el calor corporal.
Cuando un pelo blanco permanece húmedo y pegado a la piel, el tono termina cambiando.
Esto es muy común en perros que duermen sobre un lado, dejando siempre una oreja ‘aplastada’.
2. Seborrea leve o exceso de grasa natural
La piel produce sebo para proteger la superficie.
En razas nórdicas o de pelo largo es completamente normal, pero cuando se acumula demasiado:
- oxida el pelo,
- le da un tono más “crema”,
- y puede endurecer o apelmazar la zona.
No significa suciedad, sino predisposición fisiológica.
3. Roce continuo: arnés, manos, collar, dormir siempre del mismo lado
El movimiento + la grasa natural + la humedad = cambio de color.
En samoyedos es frecuente que el pelo largo de la mejilla caiga sobre la base de la oreja y frote suavemente, lo que altera la queratina.
4. Saliva de otros perros
Si en casa conviven varios perros y se lamen, el blanco se tiñe con rapidez.
La saliva contiene compuestos que oxidan la queratina y dejan un tono naranja (igual que las manchas de lágrima en ojos).
5. Hongos o levaduras (sobre todo Malassezia)
No siempre significa infección, pero esta levadura natural:
- ama la humedad,
- se desarrolla en zonas calientes,
- y produce manchas amarillentas u ocres.
Si hay olor fuerte o la piel está rosada, entonces requiere revisión veterinaria.
6. pH de la piel alterado
Un pH demasiado ácido o demasiado alcalino cambia el tono del pelo blanco.
Esto ocurre cuando:
- se usan champús no adecuados,
- hay alergias ambientales,
- o existe una dermatitis leve.
Cómo prevenirlo y mejorarlo
1. Secar siempre bien la base de las orejas
Después de los paseos, la lluvia o el baño:
- separa el pelo con los dedos,
- usa una toalla pequeña,
- si hace falta, usa un poco de aire frío del secador.
La clave es que no quede humedad atrapada.
2. Cepillado suave y frecuente
El cepillado abre el pelo, airea la zona y reduce la acumulación de sebo.
En samoyedos, diario o cada dos días es ideal.
3. Revisar collares, arneses o zonas de roce
A veces basta con:
- cambiar el modelo,
- subirlo ligeramente,
- o alternar las posiciones.
Pequeños cambios → gran mejora en pocas semanas.
4. Higiene puntual con champú suave para pelo blanco
No significa bañarlo más, sino lavar solo la zona cada 1–2 semanas.
Hay champús para pelo blanco:
- sin azules ni violetas agresivos,
- pH neutro canino,
- suaves con la piel.
Lo importante es no abusar y no resecar.
5. Vigilar la presencia de picor, olor o enrojecimiento
Si aparece alguno de estos signos:
- olor a humedad o levadura,
- piel rosada,
- costras,
- el perro se rasca,
entonces puede haber Malassezia o dermatitis y conviene consultar al veterinario.
6. Mejorar la aireación
A veces simplemente recoger el pelo de la cara con una gomita suave (sin pegar a la piel) durante un rato ayuda a que no repose encima de la oreja.
¿Es algo grave? ¿Debo preocuparme?
En la inmensa mayoría de casos, no.
Es un fenómeno estético y natural en perros de pelo muy blanco.
Debe revisarse solo si:
- hay cambios en la piel,
- huele mal,
- produce molestia,
- o el color aparece de golpe y de forma muy intensa.
De lo contrario, forma parte de la fisiología del perro y puede manejarse fácilmente.
Conclusión
El pelo blanco es un lienzo sensible que refleja todo: humedad, roce, saliva, grasa natural, pequeños desequilibrios de la piel.
Por eso en razas como el samoyedo es tan común que la base de las orejas tome un tono amarillento u “oxidado”.
No indica enfermedad, pero sí nos invita a:
- observar,
- ventilar bien,
- secar,
- mantener una higiene delicada,
- y entender que un perro blanco perfecto como la nieve… es una excepción más que una regla.

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