Nuestra filosofía de trabajo

Muy importante. Léelo hasta el final.

Patas Bien Cuidadas**. «El cuidado también implica poner límites»

Cada perro es un mundo. Cada familia también.
Nuestra manera de trabajar nace de años de experiencia, de cientos de paseos, cuidados y convivencias, y del profundo respeto que sentimos hacia los animales. Para nosotros la suerte de cuidar a un perro no es un servicio, sino una relación de confianza.

Por eso, en Patas Bien Cuidadas el cuidado siempre será personalizado, consciente y responsable.

🌿 1. Nuestro compromiso con los perros

Los perros que cuidamos reciben un acompañamiento real:

  • Paseos tranquilos o activos según su carácter.
  • Rutinas estables.
  • Seguridad y supervisión constante.
  • Caricias, atención y presencia.
  • Respeto absoluto a sus miedos y ritmos.

Trabajamos desde la calma, la amabilidad y la lectura del lenguaje canino. Siempre observamos, escuchamos y nos adaptamos al animal no-humano..

Nuestra prioridad es que el perro se sienta seguro, respetado y comprendido.

🌿 2. Nuestro compromiso con las familias

Sabemos lo importante que es dejar a vuestro perro en manos de alguien de confianza. Por eso, nos comprometemos a:

  • Informaros siempre que sea necesario.
  • Cuidar de vuestro perro como si fuera propio.
  • Ser honestos con nuestros horarios y disponibilidades.
  • Mantener una comunicación clara y amable.
  • Ser responsables, puntuales y coherentes.

Nuestro trabajo se apoya en una relación de respeto mutuo.

🌿 3. Cómo organizamos los horarios y las comunicaciones

Para trabajar bien necesitamos cierta previsión. Por eso funcionan mejor los servicios cuando:

  • Los horarios están confirmados con antelación.
  • Las modificaciones se avisan con tiempo.
  • Hay claridad en la necesidad de cada día/semanas.

Esto nos permite organizar los paseos, las visitas veterinarias, los cuidados en casa y el bienestar de todos los perros que tenemos a nuestro cargo.

🌿 4. Nuestras tarifas y por qué no competimos en el precio

Cada cuidadora trabaja de una manera distinta. En nuestro caso, priorizamos:

  • Calidad sobre cantidad.
  • Tiempo real dedicado al perro.
  • Paseos personalizados, no industriales.
  • Convivencia tranquila y consciente.
  • Conocimiento en comportamiento canino. Somos educadores.

Nuestras tarifas reflejan este cuidado individualizado. No competimos por precios bajos, porque eso no garantiza ni tiempo, ni atención, ni seguridad.

Nuestro trabajo está pensado para familias que buscan el bienestar de sus animales no-humanos, no la rapidez.

🌿 5. Qué tipo de clientes encajan mejor con nosotros

Las familias que más disfrutan de nuestro trabajo suelen:

  • Valorar la comunicación clara y respetuosa.
  • Entender que el bienestar del perro está primero.
  • Apreciar los detalles, el cariño y el tiempo dedicado.
  • Respetar horarios, acuerdos y condiciones.
  • Tratarnos como profesionales, no como improvisación.

Cuando esto se da, la relación fluye de manera natural. Y los perros lo notan: están más tranquilos, confiados y felices.

🌿 6. Cómo gestionamos los imprevistos, los cambios o cancelaciones

La vida pasa, y lo entendemos. Pero para que todo funcione:

  • Los cambios deben avisarse con antelación siempre que sea posible.
  • Las cancelaciones de última hora pueden generar ajustes.
  • Si surge algo urgente, buscaremos soluciones dentro de nuestras posibilidades reales.

Trabajamos con muchos perros y cada uno necesita su tiempo. La organización es fundamental para poder cuidarlos bien.

🌿 7. La base de todo: respeto y bienestar

Patas Bien Cuidadas no es solo el nombre de un proyecto. Es una forma de mirar a los perros y a las personas:

  • Con calma.
  • Con cariño.
  • Con límites sanos.
  • Con profesionalidad.
  • Con responsabilidad.

Nuestro trabajo tiene un propósito muy sencillo: que tu perro esté bien y que tú puedas estar tranquila.

🌿8. Un proyecto que también es inclusión

Patas Bien Cuidadas no es solo un espacio de cuidado canino. Es también un proyecto que promueve la inclusión y el bienestar compartido.

En algunos paseos y actividades participan, de forma acompañada y segura, personas con diversidad funcional o con necesidades especiales. A través de los perros:

  • Se trabajan la responsabilidad y la constancia.
  • Se refuerza la autoestima y la sensación de utilidad.
  • Se crea un vínculo afectivo que ayuda a gestionar emociones.
  • Se genera un entorno de respeto hacia todos los cuerpos y todas las diferencias.

El perro se convierte en un puente: une mundos, abre conversaciones y ayuda a construir una comunidad más amable.

Este enfoque forma parte de nuestra manera de entender la educación, la afectividad y el cuidado: nadie sobra, todos cuentan.

“El cuidado verdadero supone un equilibrio: presencia, respeto y límites que protegen.”

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